lunes, 27 de junio de 2011

Benihana

En medio de la fiebre de franquicias norteamericanas que se instalan en nuestro país (ya sea primerizas como Starbucks o reincidentes como el caso de la inminente reapertura de Wendy’s), hubo una que pasó casi inadvertida por su prácticamente nulo conocimiento a nivel local (comparada con monstruos como Mc Donalds y Pizza Hut, por ejemplo) pero que es un fuerte exponente de la comida asiática en EE.UU. (de hecho, cotiza en el NASDAQ). Con la idea de revertir esto rápidamente, Benihana se instaló en la estratégica esquina de Coronel Díaz y Arenales del Alto Palermo, justo entre otros dos colosos gastronómicos: Friday’s y Starbucks.
Como buena cadena yankee, mantiene ciertas premisas como grandes salones con mesas y boxes y un ambiente por lo general que tiende a ser un tanto oscuro. Sin embargo, hay algo que diferencia a este restaurante del resto (tanto de las cadenas como de la oferta más autóctona) y es el método teppanyaki que pregonan. Consiste en la preparación de los platos (por lo general salteados y arroces revueltos) sobre planchas (denominadas hibachi) en las que los comensales (en el caso de Benihana, hasta 8 personas) se sitúan alrededor de la misma para apreciar la destreza del cocinero. Más allá del riesgo de recibir alguna salpicadura de aceite ocasional y el olor a humo impregnado en la ropa, el show en sí es algo que vale la pena apreciar y distinguen a este lugar del resto.
Como llegamos bastante temprano y no teníamos muchas ganas de esperar a seis desconocidos para poder disfrutar del teppan, optamos por sentarnos en una mesa tradicional y probar el sushi del lugar. Mientras escudriñábamos la carta de rolls, pedimos dos tragos como para entrar en calor: el Benihana Punch (ron, licor de duraznos y frutilla, sour mix, jugo de naranja y jugo de ananá) y el Exotic Mojito (malibú, pulpa de ananá, pulpa de mango y menta macerada en limas). Para los que le gustan los tragos frutales como a mí, ambas opciones superaron ampliamente mis expectativas.
Ante la gran variedad de rolls y la poca oferta de combinados chicos que contengan estos rolls, optamos por un combo de salmón de 20 piezas bastante estándar (formado por sashimis, nigiris y New York y Philadelphia rolls). En general, el sushi es mediocre tirando a malo: el salmón es rico, pero el arroz estaba mal cocido y los rolls tenían ingredientes atípicos como zanahorias naturales que los hacían demasiado crocantes para mi gusto. Con la expectativa de revertir la pobre experiencia del sushi, pedimos un creme brulee que no hizo más que recordarnos que no hay que pedir este postre en otro tipo de restaurante que no sea francés (y hasta incluso en algún que otro francés muchas veces deja bastante que desear). Luego de una espera de por lo menos media hora, nos trajeron una creme brulee fría, con el caramelo líquido encima  (sin flambear a pesar de que en la carta aclara que viene flambeada) y con gusto a cardamomo (en la carta no aclara que es saborizada). Por suerte, luego del reclamo tuvieron la “gentileza” de sacarla de la cuenta que nos trajeron casi de manera instantánea.
Lo único destacable, en sintonía con los tragos del inicio, es la interesante carta de vinos, aunque todas botellas de más de $60 (pedimos un Animal Malbec a $78).
A pesar de que no me pareció excesivamente caro (pagamos $130 por persona), creo que Benihana está más orientado a un público turístico dispuesto a pagar este precio por el show, sin poner demasiado foco en la calidad de la comida.
Benihana
Arenales 3310
Teléfono: 0810-345-BENI (2364)

No hay comentarios:

Publicar un comentario